Saturday, October 17, 2009

¿Cuál salud?
Noé Valdés
Esta segunda semana de octubre que terminó, la verdad fue un acto heroico llegar hasta el domingo, desde el sábado pasado nos cayó el chahuistle; primero a uno de mis tigrillos le vino una depresión y lo tuvimos que llevar con el cardiólogo, luego con el neurólogo, y como no veíamos avance en su recuperación, lo llevamos con un médico naturista, después con un acupunturista, con el homeópata y rematamos con las viejitas que curan de espanto y los que le hacen a lo sobrenatural y no sé cuál fue el remedio, pero logramos su recuperación.
Le siguió el único abuelo que queda de la familia, el lunes le subió el azúcar, quesque por la edad, hubo necesidad de internarlo en el IMSS; permaneció en urgencias por espacio de tres noches tirado en el suelo en una colchoneta porque no había piso donde colocarlo, el nosocomio de Las Lomas o sea la clínica 11 estaba hasta el tope de enfermos, no había cama ni para remedio, el “granfhater” aun permanece internado y toda la familia pide al todo poderoso que lo ayude a superar su enfermedad y que pronto esté en casa.
Por cierto que en el Seguro Social, antiguamente no dejaban que por lo menos un familiar estuviera con el enfermo y había que regarle y hasta ponerse de rodillas para que el policía de guardia te diera permiso de ver a tu pariente, hoy, personal del propio Seguro, no piden, exige que un familiar se quede con el paciente porque no hay personal que lo esté vigilando.
En la misma semana, otro familiar comenzó con que se le trabó la cintura y, nada, que se le había atrofiado un disco de la columna vertebral, cargándolo subimos y bajamos con él y que había que ver al traumatólogo, que la faja, que radiografías, que una inyección para el dolor, que un ultrasonido, que era necesaria una resonancia magnética, pero ahí va el pero, la resonancia magnética es un estudio caro y lo hicieron a través del Seguro Social y la verdad se tuvo que recurrir a la influencia para que el estudio se lo hicieran de inmediato; al final de la semana no ha habido mucho progreso pero ahí la lleva.
Para no variar, al mismo tiempo su esposa que ya tenía programada una operación de ovarios en la clínica del ISSSTE, con todo el dolor de su corazón de dejar a su marido postrado por su problema de columna, ni modo a internarse, el miércoles fue la operación y dice el médico que la atendió que el tumor que extirpó era demasiado grande y estaba pegado a otros órganos, al hacer la maniobra de extraerlo, el tumor se rompió y el liquido se regó dentro de la cavidad y por más que le hicieron la más estricta asepsia algo quedó y surgió un problema que la ha mantenido todo el fin de semana con unas fiebres de más de 40 grados, se espera que en el transcurso de la semana mejore su salud y se le pueda dar de alta.
Y esto no termina, otro familiar, en la misma semana se internó en el ISSSTE porque tiene el problema “Síndrome de Menier” que consiste en mareos, el paciente no se puede mantener de pie porque no tiene estabilidad en sus oídos y tiene que mantenerse acostada, pues hasta la clínica del ISSSTE fue también a parar, en busca de su salud, ella si tuvo mejor suerte y solo estuvo internado por dos noches.
Y para rematar, un sobrino también se vio con problemas de salud, los primeros síntomas fue un dolor intenso en el estomago y ni modo, se le tuvo que llevar con el facultativo para que lo reconociera y valorara y le recetara la medicina necesaria. Y así a los tapaderasos salimos la semana, esperemos que la próxima sea más agradable. Por lo pronto yo me ando cuidando que no se me acerque un perro, no sea la de malas y me orine.
Todo esto lo quise comentar, no para que sepan mis amables lectoras y lectores, las de Cain que hemos pasado, sino para que las autoridades de salud, para que el Señor Presidente Calderón que a menudo nos informa a través de los medios de comunicación, que cada día son más los afiliados al Seguro Social y no hay ni capacidad de instalaciones ni suficiente personal; también este mensaje va para los del ISSSTE, que también hay demasiadas deficiencias en la atención a los pacientes que solicitan sus servicios.
Es cierto que son muchos los que han afiliado al IMSS, no lo dudamos pero el nosocomio sigue en las mismas condiciones que hace muchos años, no ha crecido su plantilla de médicos, de enfermeras de instalaciones y no se dan abasto, todos los días están los hospitales hasta el “full”, llenos de personas que llegan con la esperanza de encontrar ahí, la cura para su enfermedad, para lo que el pueblo le duele, le aqueja en materia de salud.
Ya es necesario que se haga una ampliación en los hospitales, es cierto que no queremos pagar más impuestos, pero si tenemos el Seguro y no nos atienden como quisiéramos, entonces tenemos que recurrir a la medicina privada y eso cuesta, entonces si nos friegan con impuestos y no nos lo regresan con servicios, no se vale que se pague y que después no tengamos ni el servicio de los hospitales del gobierno ni tengamos para la medicina privada.
Hay que ser realistas, en México tenemos un gran rezago en materia de instalaciones de salud, no es posible seguir diciéndole al pueblo que cada día hay más afiliados al IMSS y la verdad no hay capacidad para atenderlos, solo nos están haciendo creer que vamos bien en materia de salud y lo real es que no hay capacidad para su atención, al pueblo hay que hablarle con la verdad, no hay por qué mentirle, ni para fines políticos hay que mentirle.
LA INFLUENZA, SOLO CON INFLUENCIA
Tengo un amigo que es maestro y me comentó que hace unas semanas llevó a los nosocomios de Xalapa para que atendieran a un par de jovencitas estudiantes de una escuela de la Capital del Estado, porque había la sospecha de que tuvieran “Influenza”, peregrinó por los diferente hospitales y en ninguno le dieron atención a las niñas, lo mandaron de uno a otro y del otro al otro pero nadie le dio atención a las alumnas, ¿Entonces para que nos dicen en la TV que cuando se tenga sospecha de que alguien tenga “Influenza” que lo lleven a cualquier hospital y que ahí le darán la atención debida?, pues mienten, porque nadie los ve ni los escucha, menos los atienden, ¡No se vale! Así que cuando se sospeche que alguien tenga esa enfermedad, que el todo poderoso nos agarre confesados, porque de los médicos na nay.
DORMIR BIEN
¿Qué tal duerme amable lectora y lector?, ¡bien!, que bueno, porque los que no duermen bien desde hace una semana y no saben para donde jalar, son los obreros del SME, con eso que de un plumazo y como en los viejos tiempos, con el clásico sabadazo, los borraron de las nóminas y de la chamba, allá en la jungla del asfalto…Cualquier comentario sobre este enfermo texto, favor de enviarlo a valdesnoe@yahoo.com

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