Abortar, ¿de quién
es la responsabilidad?

Noé Valdés

Desde ya hace mucho tiempo se discute en el mundo, México no es la acepción, también aquí se aborda el problema del aborto y en las dos últimas semanas han arreciado esas discusiones, se habla de ello en la Cámara de senadores, se discute en el Congreso de la Unión, en las respectivas cámaras de diputados en cada uno de los estados que componen la geografía del país, los de provida se movilizan y también están pendientes de lo que los legisladores discuten, lo mismo hacen las diferentes iglesias que hay en el país, también agarran la bandera del aborto; las religiones están por la vida y no porque se asesine a un inocente que tuvo la mala suerte de gestarse en el seno materno equivocado.
Los que saben de leyes tratan de hacer una ley que quede, mejor dicho, que se adapte a las circunstancias y a los tiempos que estamos viviendo, una ley que proteja a las mujeres que tienen que abortar por un embarazo no deseado, se busca en la ley que la mujer tenga libertad de lo que tiene que hacer sin llegar al libertinaje, abortar en circunstancias extremas, como cuando está de por medio una violación.
Con los adelantos de la tecnología médica, hoy se puede saber en qué condiciones está el producto en el vientre materno, se puede saber si el bebé está sano o viene con algún problema congénito y que no pueda hacer nada la ciencia médica, el aborto es justificable cuando la criatura solo vendrá a sufrir a este mundo y sobre todo que al nacer represente un peligro para el producto o para la madre.
Vemos como la sociedad está dividida, existe mucha gente que aprueba el aborto y otro tanto o más que lo repudia, nos damos cuenta que cuando una cámara de diputados de algún estado del país, discute y aprueba la ley del aborto, la sociedad censura a esos diputados y los tacha de asesinos, las diferentes iglesias muestran su total repudio a esa decisión política.
Nos damos cuenta cómo se rasgan las vestiduras y enfilan las baterías en contra del aborto, todas las organizaciones que están por la vida, es un tira tira de informaciones, unos en contra y otros a favor, la realidad es que desde hace mucho años se discute este tema y no se llega a un acuerdo, a una solución en donde todas las partes que participan estén convencidas de que lo que se apruebe es lo mejor, es lo que la sociedad necesita.
Hay que hablar con la verdad, la realidad es que todo empieza en el hogar, los padres tienen que informarles a los hijos de los riesgos que se corren en un embarazo no deseado y, se debe informar sobre todo a las hijas que si se embarazan y que al final optan por abortar, la que se está jugando la vida son ellas y que afectará moral y sicológicamente a toda la familia, aquí es como decía un slogan del IMSS, después de un accidente ya nada es igual, lo mismo sucede en estos casos, después de un aborto ya nada es igual y pensar que hay tantos métodos para no llegar a un embarazo no deseado, disfrutemos la vida con responsabilidad.
La información es para toda la familia pero especialmente para las hijas, quienes son las que viven en carne propia las consecuencias de un aborto, es un hecho que la vida queda marcada para siempre; la existencia de una jovencita deja de ser tranquila, cuando escucha el tema le hierve la sangre por todo lo que le sucedió. Un embarazo deseado puede ser lo más hermoso y sublime para una pareja, en cambio un embarazo no deseado puede ser la peor de las pesadillas, con muchas secuelas. Así que en el hogar es donde está el secreto de que las muchachitas tengan una juventud feliz o desgraciada, depende de los padres que les enseñen qué es bueno, qué es malo y qué no deben hacer, el resto es para quien lo debe de evitar.
Hay que ejemplificar, si en la casa tenemos un pozo y tenemos hijos pequeños, no podemos pensar que no va a pasar nada si no se toman las debidas precauciones, para que no suceda una desgracia tenemos que tapar el pozo de tal manera que solo cuando se tenga que extraer agua de ese pozo se podrá quitar la tapa, de lo contrario va a suceder lo que no queremos que suceda.
Si vamos en la carretera y vamos manejando y queremos rebasar, no podemos pensar cuando se quiera hacer el rebase, yo creo que si alcanzo a pasar, ¡no!, el yo creo no debe existir porque nos estamos jugando la vida, se debe rebasar si se tiene la certeza de que se va a lograr el rebase. Si el carnicero está cortando los huesos en la sierra eléctrica y ya tiene un pedazo demasiado pequeño, no debe de pensar que no se va a cortar, debe tomar las debidas precauciones.
Como el chofer del tráiler que tiro el puente de Murillo Vidal, si las autoridades, sabiendo que el puente no aguantaba más de 10 toneladas de peso, no debieron haber pensado que nadie se pasaría con una carga de ochenta toneladas por ese puente, ¡no!, repito, el hubiera no existe, debieron haber puesto un arco como el que ahora está para que no pasara un solo vehículo por ese puente, se le debería de rendir un homenaje al chofer que nos abrió los ojos y que con su vida nos enseñó que por esos puentes no deben pasar traylers de más de 20 toneladas de peso.
Así que no hay que desgarrarse las vestiduras echándole la culpa a los abogados, a los diputados, a los senadores y a muchas autoridades que quieren que exista un orden jurídico para que sea más fácil la vida, no se abortaría si escucháramos a nuestros padres. Las diferentes iglesias deberían de colaborar con propuestas, hacer que exista más conciencia de lo que se está haciendo, que el aborto sea la última opción.
Yo se que tratar este tema de esta manera no es bien visto, pero lo que se quiere es dar a entender que las iglesias, las diferentes organizaciones que están por la vida, deberían de hacer un programa integral permanente, en donde sean los padres los que jueguen el papel más importante, que platiquen con sus hijos y que a diario los estén enterando sobre todo a las hijas que se cuiden de no embarazarse, sobre todo de un embarazo no deseado, que se enteren bien de cómo piensan, con quien hacen su relación sexual, que no dejen caminar a sus hijas con el primero que se les pare enfrente, o cuando menos que les hablen constantemente del tema y ¡por favor!, que las autoridades no desvíen el problema en politiquerías.
Que estén bien enterados los padres con quién salen sus hijas, con quién conviven para que no salgan las chiquillas con la sorpresa de que están embarazadas, ese es el secreto, se les tiene que despejar todas la incógnitas en materia de sexualidad a los hijos, decirles que no se embarquen a temprana edad, que hagan el sexo con responsabilidad, por todo lo que conlleva realizar las relaciones sexuales irresponsablemente, para que no afecte a la familia, moral y económicamente.
Es posible que el que escribe, toda la vida le haya vendido la carne al diablo y hoy le quiera vender lo huesos a Dios, pero no se trata de eso, se trata de que hagamos conciencia a tiempo, de que si caminamos y hacemos nuestra vida irresponsablemente, el mundo se nos vendrá encima. No se trata de dar consejos, se trata de que hagamos las cosas responsablemente, que conduzcamos a nuestros hijos por el buen camino, para que tengan un futuro más prometedor.
BUEN TRABAJO
En el IPAX las cosas se están haciendo bien, Con Carlos Rodríguez hay dirección, hay más sentido humano en sus elementos. El fin de semana que terminó me fui a mi paraíso, a Xico, cuando regresaba, en el tramo de la carretera de Coatepec a San Marcos que está para llorar, llena de baches y los vehículos caben bien en cada uno de ellos, no se sabe a qué autoridad hay que recurrir para que haga su chamba, pero es necesario un buen bacheo.
Bueno pues circulaba en ese tramo cuando caí en uno de esos hoyancos y pécatelas, los dos llantas se me volaron, estaba obscuro y los vehículos que pasaban no se detenían a ayudarme, de pronto una patrulla del IPAX prendió sus códigos y se detuvo, de inmediato un oficial se dirigió a mí y me dijo, ¿Qué le pasa amigo?, mire como quedo mis neumáticos, de inmediato llamo a uno de los oficiales que venía en la batea de la camioneta y le dijo, quédate aquí y resguarda al señor y ahora regresamos.
Se fueron y consiguieron una llanta porque la mía había quedado para el arrastre y la otra la repararon en alguna vulcanizadora de Coatepec. En verdad como se los agradezco, sin su ayuda me hubieran dado las 12 de la noche ahí, le reconozco don Carlos el buen comportamiento de sus elementos.
DORMIR BIEN
¿Qué tal duerme amable lectora y lector?, ¡bien!, que bueno, porque los que no duermen bien son los aspirantes a contender en la grande por Veracruz y ahora si el tiempo se les está viniendo encima y duerme menos el que en este momento se siente seguro, el que se siente ungido por San Fidel, ese es el que más insomnio tiene, mientras que los otros, no es que duerman a sus anchas pero tienen menos presión, saben que están en la batalla pero no como para perder el sueño…Cualquier comentario sobre este calenturiento texto, favor de enviarlo a valdesnoe@yahoo.com