Esperemos el Milagro

Noé Valdés

La luna de miel para el señor Obama fue demasiado pequeña, porque los problemas del pueblo estadounidense son demasiado grandes, tan solo fue un día de festejos y el nuevo presidente de los EEUU aprovechó las 24 horas, asistió, dicen los medios de comunicación, a 10 bailes y en todos le dio vuelo a la bailada, no desaprovechó un solo momento, sabía que al día siguiente se tenía que adentrar a la chamba en serio.
Nosotros, los de acá, estuvimos pendientes de cómo se desarrollaba el evento de ascensión del presidente numero 44 de los Estados Unidos de Norteamérica, lo vimos todo, bueno no sabemos si fue todo, vimos lo que la televisión de allá nos transmitió, vimos cómo la gente se congregaba en la avenida Pensilvania por donde pasaría el nuevo presidente, se calcula que en ésta ocasión fueron más de dos millones las personas de todas las razas, las que quisieron presenciar de cerca la toma de posesión del nuevo presidente.
Seguro estoy que la mayoría de nuestros compatriotas, como a mi, les debe haber causado extrañeza y al mismo tiempo daba envidia de ver cómo logra el pueblo del norte sanar las heridas que se abrieron en la pasada campaña presidencial, causa envidia ver como el presidente electo, unas horas antes de tomar las riendas del país, lo primero que hizo fue desayunar con su contrincante político, y con eso enviar un mensaje a todos los norteamericanos que –aquí no pasó nada, que la tarea de enderezar el barco había llegado y que se olvidaran de rencores, que lo importante es sacar al buey de la barranca.
Fueron tantas las expectativas que el señor Obama levantó, que todo el mundo estaba pendiente de los acontecimientos este 20 de enero. Y es que por la difícil situación económica que está sufriendo el mundo, todos los pueblos, ricos y pobres, tiene cifrada la esperanza de que el nuevo presidente haga un milagro, los países oprimidos y los que en estos momentos están ahorcados por las deudas, internas y externas, que tienen con los países ricos, esperan de Obama un milagro, esperan sobre todo, que sus deudas se puedan renegociar de manera más accesible, con intereses más bandos.
Los mexicanos no nos podemos soslayar a ese deseo, rogamos al santo de nuestra devoción por que las cosas en EEUU salgan bien, aquí en México sabemos que si le va mal al presidente Calderón o al que esté en la presidencia, le va mal a los mexicanos y ese deseo lo trasladamos más al norte, deseamos que al presidente Obama todo lo haga bien, para que al mundo le sea mejor su modo de vida.
Estamos en la zozobra de que los compatriotas que se fueron a trabajar al vecino país, es posible que pronto nos los regresen porque no tengan trabajo allá, deseamos que el retache no sea tan abruptamente, que si se tiene que hacer el recorte porque no exista de otra, que sea de manera paulatina, para que no nos veamos envueltos en un país de más desocupados, los que regresan tendrán que buscar su modus vivendi y si no hay esa solución, el ocio es mal compañero y nos puede desencadenar muchos problemas.
Ahora que hay un nuevo inquilino en La Casa Blanca en Washingnton, tenemos la esperanza de que tenga la inteligencia para sortear los problemas de sus compatriotas y de esa manera también nos veríamos beneficiados, ya que de la manera en que resuelvan sus problemas, de esa manera también de paso, resolverán los nuestros y los de muchos pises del mundo.
Hace unos días platicaba con un amigo y se refería a los problemas que produce la migración de compatriotas que se van en busca de trabajo al vecino país, hablaba que los que sueñan el sueño americano, más que sueño es una pesadilla, que tienen que enfrentar muchas vejaciones, que es una vida de la fregada estar en condiciones de indocumentado, siempre existe la zozobra de que en cualquier momento te retachen a tu pueblo.
Por eso me decía, hoy que llega un presidente que sabe de los problemas que vive el mundo, que los sabe, que tiene conocimiento porque los ha padecido, los ha vivido en carne propia, si no él, por lo menos su familia, su padre y su madre y sus familiares, así que de él esperamos que gobierne bien, en primer lugar para sus compatriotas y de paso, para los países que siempre los han visto hacia abajo, esperamos que la dignidad del hombre, hablando de género, se reivindique con Obama, es el deseo de alguien que está en un rinconcito veracruzano.
Por lo que se refiere a los migrantes, cuando platiqué con mi amigo, me dijo. Mira Noé, si los EEUU quieren, pueden; en primer lugar hacer un censo de quienes son los empleadores en los Estados Unidos, y de esa manera se sabrá cuánta mano de obra necesitan que llegue a su país, podrían exigir a esos empleadores, que todo personal que contraten lleve sus documentos migratorios en regla. Cuando se sepa cuanta es la mano de obra externa la que necesitan, entonces que se distribuya equitativamente entre los países de Centro América, de los del sur, de otros continentes y por supuesto de los mexicanos.
Para que de esa manera como Canadá, que ese país solicita mano de obra joven pero la solicita con documentos y de cada país salen los jóvenes hacia Canadá ya contratados y no tienen que pasar por las vejaciones que sufren los indocumentados, con los coyotes, los polleros y con los patrulleros de migración, que son una calamidad para esos jóvenes que viajan en los vagones del tren en busca del sueño americano.
Se ahorrarían muchos dolores de cabeza en todos los países por donde pasan los migrantes, y lo más importante es que las familias se quedarían un poco más tranquilas, sabiendo que sus familiares que se van a otro país ya están contratados y no tendrán que arriesgar el pellejo al cruzar el Suchiate para el caso de los centroamericanos, o en el Rio Bravo como es el caso de los mexicanos.
Nuestros compatriotas no tendrían que arriesgar el pellejo al internarse al desierto y morir deshidratados por el calor o de hipotermia por los severos fríos que se dejan sentir en esas tierras, las familias mexicanas se desintegrarían pero tendrían la confianza que sus familiares no corren peligro de que algo malo le suceda en el trayecto.
Y lo que me dijo al final de la plática con mi amigo, es que de esa manera el gobierno norteamericano tendría más control con la gente que va a trabajar a su territorio y al mismo tiempo podría rolar la chamba, podría dar trabajo a una cantidad de personas y a los dos años regresarla para que viaje gente nueva a trabajar con ellos, y así cada dos años estar rolando a los compatriotas y todos tendrían oportunidad de trabajo.
También comentamos de que se dejaría de tener el pretexto de construir una muralla en la frontera, argumentando que por ahí pasan nuestros compatriotas, si se continuara haciendo la barda sería por otras cuestiones, no por la migración, eso ya no tendría razón de ser. Solo me queda soñar con este nuevo sueño guajiro, que espero se tome en cuenta para que en lo futuro las familias que tienen la necesidad de que sus hijos tengan que salir en busca de oportunidades de trabajo, lo hagan de la manera que no corran peligro.
DORMIR BIEN
¿Qué tal duerme amable lectora y lector?, ¡bien!, que bueno, porque los que siguen sin dormir bien son los concesionarios de autobuses urbano, con eso de el Presidente Calderón no les han resuelto nada del diesel, y ahora ya les pegaron el insomnio a los usuarios, porque si no baja el combustible se corre el riesgo de que suba el transporte y de esa manera si se verían afectados las clases mas necesitadas que hacen uso de ese medio de transporte… Cualquier comentario sobre este presidencial texto, favor de enviarlo a valdesnoe@yahoo.com