FOTOCOMENTADAS


La Madre Tierra parió
a 33 mineros

La vida derroto a la Muerte: Evo Morales

Dios y el Diablo me pelearon: minero Mario Sepúlveda

Por Noé Valdés

Las palabras Chile, Desierto de Atacamba, mina San José, Copiapó, todos los días las escuchamos por la TV, las vimos en internet, en los medios impresos y este 12 de octubre se multiplico. Por todos los rincones del mundo se sabía que era el día “D”, el día que rescatarían a los mineros atrapados desde aquel 22 de agosto en que se derrumbo parte de la mina y los dejó incomunicados con el exterior.



Yo no me imagino en ese lugar, no se cual sería mi reacción el estar durante quince días de los 68 que fueron, sin comunicación con el exterior, pensaría que nos estaban buscando, que se hacía todo lo posible por sacarnos de las entrañas de la tierra, pensaría que por los días que ya habían transcurrido, los del exterior ya se hubieran dados por vencidos y convencidos que ya no nos encontrarían con vida y hasta nos hubieran hecho la misa de despedida.



Imagino a mis tigrillos, tristes porque ya no verían más a su padre, a la morena linda resignada enfrentando la vida como padre y madre, porque ella siempre se ha mostrado como una mujer valiente y ya hubiera echado el último puño de tierra para darme la despedida, el último puño como si faltara tierra para que me sepultaran.



A lo mejor y viendo las cosas con optimismo, hubiera pensado que hasta que diera el último respiro del contaminado aire de la mina, hasta ese momento dejaría de pensar que no se pudo hacer el rescate, o todo lo contrario, imaginaría que los de arriba, los que estaban con la esperanza de que estábamos vivos en las entrañas de la tierra, esa fuera la clave para que nosotros lográramos ver nuevamente la luz del día, esa luz que todas las noches cuando nos acostamos, la añoramos y nos desespera cuando en la madrugada se nos escapa el sueño, tenemos que esperar y como se hacen largas las horas para que llegue el amanecer. Para los mineros chilenos que hoy regresaron al exterior, tuvieron que esperar más de dos meses para ver el nuevo amanecer.



Los mineros, si no hubieran estado preparados para esa chamba, no se hubiera logrado un final feliz, la preparación jugó un papel importante en este caso, la convicción de que se trabaja en un lugar en donde todo puede suceder, que en cualquier momento se puede encontrar la veta más grande y rica de oro, o se les puede venir el mundo encima y hasta ahí llegaron, hasta ahí se terminan las ilusiones, del que esta taladrando la tierra como la familia, que tienen la esperanza todos los días de que llegue el padre con el sustento.



Son muchas las cosas que pasaron por la mente de cada uno de los 33 mineros chilenos que permanecieron durante 68 días bajo tierra, pero como dicen por ahí, cuando la ralla está marcada y ya llegó la hora de partir, aunque te quites y, si la hora no ha llegado aunque te pongas, los milagros existen, las diferentes iglesias se unieron y todas oraron con un mismo dios y por un mismo ideal, rescatar a todos los mineros sanos y salvos.



Por eso yo, cuando vi a través de la TV, que el huinche empezó a girar y que de las entrañas de la tierra, la capsula Fénix, salía con su valioso cargamento, lo único que alcance hacer es mirar el Cristo de mi recama y le dije ¡¡¡Que Grande eres mi señor!!!, porque un milagro solo lo puede hacer el que está en el cielo, y claro con la inteligencia de la cual doto a sus hijos el TODO PODEROSO, con la inteligencia de los que estaban en tierra y que hicieron todo lo necesario para rescatar con vida a los mineros.



Cuan empecé a ver que la capsula Fénix, se perdía en la superficie de la tierra y de nuevo volvía a emerger con otro hermano minero, se me vinieron a la mente muchas ideas, como cuando leí la novela “Viaje al centro de la tierra” de Julio Verne, pensé, una cosa es que te lo cuenten en una novela y otra cosa es que vivas la realidad, recordé la mina Pasta de Conchos en el norte de México, recordé cuando sucedió aquella desgracia, los dueños de la mina, en lugar de darle todas las facilidades a los familiares, informándoles de las condiciones en que imaginaban que se encontraban los mineros, fue todo lo contrario, cerraron las puertas y no dejaban que nadie entrara, incluso a la prensa no le dejaban entrar.



Por eso los milagros en la mina de Chile se manifestaron desde el día en que se supo que había ocurrido el accidente, a partir de ahí surgió la voluntad y se dispuso de todo lo necesario para que se realizara el rescate y por lo que vemos desde aquí hubo toda la disposición de la empresa y sobre todo del gobierno del Presidente de Chile de Sebastián Piñeras, quien ordenó que se recurriera a la tecnología moderna y rescatar las 33 vidas.



Se debe decir que ahí los milagros se manifestaron desde el inicio de la búsqueda, desde que se mando la zonda y trajo de regreso un papel con la buena nueva que decía “Estamos bien en el refugio los 33”. A partir de ahí el entusiasmo creció, se dispuso de todo lo necesario, no importo de donde se trajo, tal vez lo llevaron de otra parte del mundo pero todo lo que fue necesario se consiguió y ahí están los resultados, no como aquí en México en que todo se dejo al valemadrismo, ni el gobierno ni los dueños se preocuparon, la tierra ya les había caído a los mineros y ya no les importo ni los cadáveres.



Cuando vimos por la TV al presidente Piñeras y lo vimos con ese carisma que le caracteriza, como deseamos los mexicanos que así fuera nuestro presidente, que cuando se presente el señor Calderón con su pueblo tuviera un poquito de ese jale que tiene el Presidente chileno, que lastima, ojala y en la próxima elección para Presidente de México, los mexicanos no nos equivoquemos, por el bien de todos. ¡Que viva la vida!



DORMIR BIEN



¿Qué tal duerme amable lectora y lector?, ¡bien!, que bueno, porque los que no duermen bien son los prestadores de servicios turísticos en las zonas inundadas, con el desastre de los huracanes los turistas no vienen, sobre todo porque la gasolina está más cara y eso encarece todo lo que se mueve con combustible, lo peor es que los prestadores de servicios no dan su brazo a torcer y no ofertan y así nadie les solicita sus servicios. Hay que echarle imaginación a la empresa turística, de lo contrario será más tardada la recuperación…Cualquier comentario sobre este rescatado texto, favor de enviarlo a valdesnoe@hotmail.com