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La lotería de Pensiones

Noé Valdés

Hay quienes dicen que el dinero no es la felicidad, los que lo tienen, opinan que es lo que más se le parece, otros comentan que el dinero lo invento el diablo y, tienen razón, por dinero se comenten las más horrendas atrocidades. Con todo y eso, todo mundo anda tras de la lana. Y si decimos que la fe mueve montañas, es cierto, pero con dinero. Desde que se nace, hasta que se entrega el equipo, todo es dinero. Lo buscamos trabajando y si no alcanza para satisfacer las necesidades, inventamos algo para obtener un dinero extra, algunas personas tienen dos trabajos, otros se desvelan por conseguir más sueldo, algunos individuos se van por la manera más fácil de agenciarse la feria, robándole al prójimo, otros, jugando a la lotería. Hace unas semanas, recién había llegado el contador Morgado Huesca a la dirección de Pensiones del Estado. Algunos líderes magisteriales que también son consejeros del Instituto, opinaron que se quitara la lotería del Instituto de Pensiones, que no era negocio y que solo daba problemas. Y es que cuando se está descontento con el nuevo mandamás de la institución y se anda con la mente caliente, se pueden decir barbaridades, se opina a la ligera, sin darse cuenta que solo se están diciendo tonterías. Opinar que se quite la lotería de Pensiones es opinar light, no entender que para que se consiguiera el permiso en la Secretaría de Gobernación se trabajó duro y macizo. No imaginan o no recuerdan, que hubo la necesidad de cabildear por meses, convencer a quienes se tenían que convencer, demostrar que es necesaria para la Institución una nueva forma de allegarse divisas frescas, que se puede con el paquete y se tiene la capacidad y el compromiso de vender la lotería, entregar los premios y recuperar las ganancias. Se obtuvo el permiso y funcionó la lotería de Pensiones, no hay queja de que no entregaran los premios. Eso le dio seriedad al programa y a la Institución, durante el tiempo que se trabajó, se debe haber visto si hubo o no ganancias. Lo de la lotería se debe entender que es un negocio, que no se puede obtener en la primera remesa grandes ganancias y que los directivos se sentarían a recibir los dividendos. Los negocios se tienen que acreditar, se tiene que trabajar y en el caso de la lotería debieron cacaraquear los huevos que se pusieron, porque como en todos los negocios se tiene que hacer publicidad. No creemos que Don Antonio Chedraui (QEPD) haya puesto su negocio en la calle de Lucio y se haya sentado a esperar las ganancias, ¡claro que no!, el emporio que hoy gozan los hijos y los nietos, es obra de un trabajo agotador. Ese es el secreto del éxito de un negocio. La lotería de Pensiones es un negocio, hay que saber esperar, tal vez tarde meses o años en acreditarse y sea un gran negocio, todo depende de los encargados de manejar esa nueva forma de buscar dinero fresco a la institución. Hay quienes no les importan el futuro del Instituto de Pensiones y hablan sin razonar lo que dicen. Esos pensaron que de un plumazo se quitara la lotería, ¡No!, esa decisión se tiene que estudiar. Sabemos que solo dos estado del país tienen esa lotería, el Estado de Chiapas y Veracruz, ¿sabe porque amable lectora y lector lo tienen?, porque no es fácil que la SEGOB autorice un negocio para alguna institución, para conseguirlo se tuvo que subir, bajar, hablar, volver hablar, usar la influencia para que llegara la autorización. Así que no se debe opinar tan a la ligera, la lotería del Instituto de Pensiones del Estado, se tiene que revisar, se tiene que ver todas las aristas. Si no se quiere continuar con la lotería de Pensiones, es mejor que se suspenda, que se estudie y ver si más adelante están las condiciones dadas para que continúe. Lo que la lógica nos dice, es que un permiso como el que Pensiones tiene, no se debería de desperdiciar, echarlo a caminar, aunque sean pocas las ganancias, al fin son ganancias, se entiende que las loterías no se hicieron para que los que las hacen pierdan, así que no nos convencen que no sea negocio y ahí está como ejemplo la lotería once de España, en donde los ciegos, en pocas palabras la gente de capacidades diferentes, son los que hacen ese negocio y son los que disfrutan de las ganancias, ¿Qué aquí no podemos hacer un negocio rentable? La lotería sería un recurso para que no a cada rato el Gobierno del Estado, tenga que entrarle al rescate, --por lo menos así nos han vendido la idea--. La lotería es un negocio que se debe poner en manos de gente que sea capaz de hacer florecer ese negocio y que le reditúe ganancias a la institución. No hay que tirar al basurero de la irresponsabilidad lo que le costó al pueblo, hacer que sea negocio, para bien y tranquilidad de los afiliados y pensionado, que tienen la esperanza de continuar recibiendo su mesada. DORMIR BIEN ¿Qué tal duerme amable lectora y lector?, ¡bien!, que bueno, porque los que también duermen sabroso y hasta roncan bonito, son todos los elementos que Javier Duarte les encomendó que promovieran el turismo en Veracruz, es más, duermen tan parejito que hasta sueñan que internacionalizan Veracruz y su “publicidad” no llega ni a Totalco, ¡qué barbaridad!, ¡no que muy muy doña Leticia!, haber cuando se dignan despertar…Cualquier comentario sobre este suertudo texto, favor de enviarlo a valdesnoe@hotmail.com