Los bienes de la iglesia, por Noé Valdés
Hace algunos ayeres, un amigo muy querido originario de Misantla me platicó que en el inicio de la década de los 40s del siglo pasado, vivía en su pueblo un señor que había amasado una gran fortuna. Tenía potreros con ganado, fincas de café y en la ciudad era propietario de varias casas y su familia estaba formada por su esposa él y una hija.
La única heredera era muy guapa y todos los jóvenes de la tierra del cachichín la asediaban; en todos anidaba la esperanza de que a alguno de ellos le diera el sí y poder casarse con ella. El tiempo pasaba y la jovencita se iba haciendo mujer y ninguno de los muchachos era el afortunado.
Un día llegó un joven que era dentista, puso su consultorio y a los pocos meses se supo que era el prometido de la tan ansiada muchacha del pueblo. Fueron pocos los meses de noviazgo y pronto se casaron y del consultorio del dentista no se supo más; pasó el tiempo y un día la hija junto con su marido y con el consentimiento del papá vendieron uno de los potreros con la puerta cerrada, lo que quiere decir que lo había vendido con todo y animales, meses después vendieron una finca, posteriormente una de las casas.
Como Misantla en esos años era pequeña, todo el pueblo se enteraba de lo que pasaba, todos hablaban de la fortuna de un señor que trabajó duro para hacerse de sus bienes y que hoy el yerno la estaba haciendo talco. En una tienda de la ciudad un señor se encontró con otro y le dijo:
-Compadre, ya viste lo que le está sucediendo a nuestro amigo, ¿Qué te parece?
A lo que de inmediato su interlocutor le contestó:
- Mira hermano, ¡escucha lo que te voy a decir y escúchalo bien!; laguna que no tiene salida tiene resumidero.
En este mes de julio que está por terminar, por todos los medios de comunicación nos hemos enterado que en Los Ángeles California, el cardenal Roger Mahony ha pedido disculpas y ha ratificado que la iglesia católica pagará una indemnización de 660 millones de dólares a las más de 500 victimas de abuso sexual. Dijo que con la venta de inmuebles de la iglesia, estimados en 4.000 millones de dólares y dinero de fondos de inversión harán el pago.
La arquidiócesis de Los Ángeles es la más grande de los Estados Unidos, ésta llegó al acuerdo de resarcir a 508 demandantes por hechos ocurridos desde 1930 hasta el 2003. Se dijo que algunas de las víctimas han esperado más de 5 décadas para que se les hiciera justicia y saliera favorable su resolución. Este es un pago por esa deuda largamente vencida, dijo Raymond Boucher principal abogado de los demandantes según publicó un matutino de allá.
Cuando el Cardenal Mahony pidió disculpas a las víctimas dijo:“Les digo que me gustaría que sus vidas fueran como una cinta de video, para poder retrocederlas y borrar esos años de miseria y dificultades y recomenzar cuando eran jóvenes, antes que esto sucediera” y señaló que esto no tendría que haber sucedido.
Claro que no debió de haber sucedido, porque las víctimas ahí están, algunos ya murieron y ni por arte de magia se podría hacer que desaparecieran o que al menos a esas personas afectadas se les pudiera borrar de la mente lo que les sucedió, no hay forma de que esto sucediera. Lo que yo no entiendo es por qué la iglesia católica se enfrasca en mantener el celibato. Perdón amables lectoras y lectores, lo del celibato si lo entendemos y lo entendemos perfectamente, es por qué no se quiere compartir los bienes de la iglesia, porque si un sacerdote se casa la ley civil obliga a compartir los bienes, tendría que comprarle casa a su mujer, la manutención de ella y de los hijos, la escuela y todo lo que implica una familia, ¿de donde saldría? y lo peor sería si se divorcian, el problema que sería repartirse los bienes.
No me imagino un presbítero tener que pagar pensión por los hijos, ¿Cómo le tendría que hacer? Ni modo; tendría que recurrir a las alcancías de los santos, ¿como que no cuadra verdad?, inocentemente digo, tal vez ese sea el por qué la iglesia no le permite a los sacerdotes que se casen. Desde que la iglesia católica se fundó en la tierra ha habido de todo, San Pedro que fue el primer Papa era casado y la mayoría de los apóstoles tenían esposa. El Nuevo Testamento sugiere que las mujeres presidían la comida eucarística en la Iglesia primitiva. En toda la historia de la Iglesia de Jesús han existido cantidad de cambios, muchos Papas han sido casados y muchos hijos de Papas han sido Papas.
En el año 385 Siricio abandona a su esposa para convertirse en Papa, decreta que los sacerdotes ya no pueden dormir con su esposa, en el año 401 San Agustín escribe que “Nada hay tan poderoso para envilecer el espíritu de un hombre como las caricias de una mujer”, en 580 el Papa Pelagio II; su política fue no meterse con sacerdotes casados en tanto no pasaran la propiedad de la iglesia a su esposas o hijos.
En el año 1045, el Papa Bonifacio IX se dispensa a sí mismo el celibato y renuncia al papado para poder casarse y algo más reciente en julio de 1993 Juan Pablo II dice “El celibato no es esencial para el sacerdocio; no es una ley promulgada por Jesucristo” Entonces, como dice la canción de Juan Gabriel, “Pero qué necesidad, para qué tanto problema”
Los hechos son muy claros, aunque el celibato en la iglesia católica es para la renuncia a los apetitos carnales; la frase que encontró Augusto Monterroso en la cantina el Fénix del D. F. en 1960 y está registrada en su libro “Lo demás es silencio” es bien clara y dice, “Es cierto, la carne es débil; pero no seamos hipócritas: el espíritu es mucho más”. En esencia el celibato es por no compartir los bienes del sacerdote con la mujer, trasladándolo a la institución, es no compartir los bienes de la iglesia y así ha sido y será por todos los siglos y había dado buenos resultados, pero por culpa de que la carne es débil ya se ve lo que hoy está sucediendo, tiene la iglesia que pagar indemnizaciones por hechos de pedofilia.
Regresando al relato inicial se confirma lo que dijo aquel misanteco a su compadre en la década de los 40s, “laguna que no tiene salida tiene resumidero” y a la iglesia católica creo que ya le encontraron el resumidero….Cualquier comentario sobre este irreverente texto favor de enviarlo a valdesnoe@yahoo.com